31 de agosto de 2009
Es la ley la que te castiga
28 de agosto de 2009
Esta nueva etapa*
## Hoy salí para el trabajo con menos ropa, se anuncian calores y tengo ocho -de las quince cuadras que camino- en subida. Esto era lindo en invierno, las trepaba como alpinista. Llego, armo rápido las actividades en el negocio y parto hacia el banco.
##Centro, calor, espero el verde en la avenida. Una persona ciega a la que ayudo a cruzar me pide acompañarlo hasta la parada del R2. En el trayecto hablamos, va tomado muy fuerte de mi brazo y me lo aprieta todavía más cuando me agradece. Se me hace un nudo en la garganta, es mi primera vez guiando a un ciego.
## En el banco la cola que hago se mezcla con la del cajero automático, donde una chica ayuda a los desorientados vestida con un elegante trajecito gris. Escucho detrás de mí a uno de los policías de la sucursal indicando a un infiltrado: “la cola viene de aiá, on tá la azafata”. Saco la agenda y leo para mí esto de Ezra Pound:
CAUSA
Reuno estas palabras para cuatro personas,
alguien más puede cazarlas al vuelo,
oh mundo, lo siento por ti,
No conoces a esas cuatro personas.
El colectivero me saluda educadamente al subir. Relaciono esto con la tormenta de Santa Rosa, que seguro otra vez no viene. Justo veo por la ventanilla a un hombre pasar con un broche sujetándole el pantalón a la pantorrilla, y me recuerda al abuelo de Javier, mi amigo de la infancia, que me enseñó lo que uno nunca olvida: a andar en bicicleta
## Llego a mi negocio, que a todo esto agrego es un laboratorio. Hemos recibido una demanda judicial de una ex empleada que inventó haber trabajado más horas y en otra categoría. Las malas compañías pienso, y me pongo como el niño en la foto. Continúa.
*intento de contar a través de mi cotidiano, al estilo del diario de Evadam (aguante LadyB !) foto:William Klein
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23 de agosto de 2009
Verde que espera la lluvia
Yo era el ágave que te regalé, lo que te había quedado de mí. Ahora que ya no existe, no es necesario explicar nada. Dijiste que no te gustaba porque tenía espinas y podía crecer mucho. Pero la verdad es que el ágave era yo, y no me querías cerca. Las espinas son para defenderse, pero para vos los signos del peligro estaban en cada cosa que te rodeaba. Los ágaves crecen mucho si se los pasa a tierra. Lo nuestro tampoco creció pero sí hubo heridas. Me recordaste lo que leí de un personaje de Piglia, Lucía Nietzsche:
No hay nada tan abyecto, dijo Lucía, como la convivencia de un hombre y una mujer. En teoría podemos comprender a una persona, pero en la práctica no la soportamos. El matrimonio es una institución criminal. Con los lazos matrimoniales siempre termina ahorcado alguno de los cónyuges. En eso reside el sentido de la fórmula: Hasta que la muerte nos separe.
Se acerca la primavera y pienso en mis buenas intenciones entonces, y sigo cultivando plantas. Ellas crecen vigorosas por mi perseverancia, y alguna enmienda orgánica. Las lluvias vendrán para terminar con esta seca polvorienta.
El cuento completo aquí, parece larguito pero no tiene desperdicio.
19 de agosto de 2009
Dedicados a las cosas esenciales
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14 de agosto de 2009
Pez para el hombre perfecto
Así que recorto con ahínco pensando en lo bien que va a salirme esto. Y mando el pececillo a la sartén con aceite. Y por qué no?. El pez no ganaba volumen como yo esperaba, crecía desesperada mi fe, no es buena la fe? Aprendía sencillamente a convivir con la desilusión, no es bueno aprender?
Mi desencanto (que todavía no era fiel) avanzando a medida que el papel azul se volvía negro. El humo y el olor del aceite una evidencia difícil de esconder ante la llegada de madre. Que escuchó mi relato apenas entró, sus ojos yendo de la sartén a mí, de mí a la sartén. Una mirada de incredulidad y preocupación. Porque, después de todo, se trataba de un niño de nueve años.
13 de agosto de 2009
Otro santo
I
Tú tienes mi atención: que es
una delicadeza, más allá
de lo que yo pueda decir. Yo tengo
tu constancia hacia algo
más allá de mí misma.
La fuerza
de tu compromiso nos recarga: vivimos
de ese empuje, prestándonos coraje
el uno al otro.
II
Quisiera hablar contigo.
¿Con quién más podría hablar?
Tú eres el que hace
un mundo del que hablar.
Va madurando en tu calor
la fruta: todas esas manzanas
y las peras que crecen
junto al muro, al sur de mi
cabeza. Si prestas atención
la lluvia cae para ellas, y
ellas beben. Y si
hablas en respuesta
las semillas
saltan al suelo.
Habla o no digas nada. Tu silencio
va a hablarme.
(Denise Levertov)
Obsequio diminuto para una grande: Mmelulú, que hoy cumple años.
Con mucho cariño (y no sabés lo que me costó encontrarlo)
9 de agosto de 2009
El cocinero fiel
A: Ja es que la recibo bien, comida nunca le faltó!
6 de agosto de 2009
La idea de un parque
3 de agosto de 2009
El trabajo, antes
TRABAJAR: 'sufrir', 'esforzarse, procurar por', 1220-50, de donde más tarde 'laborar, obrar', siglo XIV.
Del latín vulgar TRIPALIARE 'torturar', derivado de TRIPALIUM 'especie de cepo o instrumento de tortura' , siglo VI. Este es compuesto de TRES y PALUS, por los tres maderos cruzados que formaban dicho instrumento, al cual era sujetado el reo.
De trabajar deriva el sustantivo trabajo, 1212, que conserva en la Edad Media y aún hoy en día el sentido etimológico de 'sufrimiento, dolor'.
La forma primitiva fue trebajar, que luego sufrió asimilación de las vocales, pero con tre- se pronuncia todavía en catalán.*
Así que siendo odiado Lunes del trabajo, dije: a jugar un ratito, sí, aunque sea un ratito aquí**